P a u l o C o e l h o
Llevame a las montañas citadinas
donde estan los dias,
casi nuncas dirías
en recordares acentuarías
Alli quizas, en las estancias urbanisticas
los ajenos destiempos pasan todavia,
los estas viendo, muy cerquita
estas pasando, en el tranvia
Paulo Coelho , en una ventanilla,
mirando por su departamento,
en la anzures, fue el predilecto
todas las tardes se salia un rato
a ver que habia,
quizas aqui no sea Brasilia
eso lo decia el alquimista
Habia un lugar que frecuentaría,
no muy lejos, de alli
y, tendria que pasar el circuito interior
y Paulo le temia
Habian varios puentes peatonales
y, al preguntarle, el porque no se subia
decía
que unos pasos eran mas fáciles directos,
a tener que hacerlos , en una subida,
que es como las chicas,
no se les monta uno encima
sino que,
les dice oye, dame tu delicia
ya si no quieren pues no quedrian
La colonia de enfrente Paulo no la entendía,
alla, alla Octavio Paz vivía
pero no se conocían,
ya no se alcanzarían
Que curioso que los magos se ubiquen tan cerquita
unos de otros,
que casualidad no coincidente
que aquellos dos poetas, estando tan cerca
no se conociesen,
la colonia anzures siempre es muy ajena
a la que tiene, enfrente
Paulo solo iba, hacia alla
a la lavandería, y a un restaurante
de comida arlequina,
alli estaba siempre
Ahi había, un despacho esoterista
con una tarotista
y alli el iba
Pasaba despues de la tintorería y,
cargando su bolsa , entraría,
ya lo esperaba la esoterica lista
Paulo las cartas no le leían
sino que, llevaba un cuaderno blanco,
que ni renglones tenía
y, se lo daría, a la tarotista
Poco a poco Paulo junto mucha cosa escrita
y, una vez llenado su cuaderno scribe,
ya otro no compraria
Volvio con la adivina lista ,
a que le pusiera un orden a la libreta misma,
a que le dijera
que con que frase iba empezar
su obra escrita,
con cual sería?
La esoterista, ya entonces
tomo las cartas,
y se las leeria..
tu lo haras, tu eres el alquimista..
asi le pongo a mi libro?
con ese titulo lo promocionaría?
si
y, tomando el fajo de cartas
a Paulo se las daria
llevatelas a donde fueres,
y usalas cuando escribas
tienes y tendrás suerte
asi le diría,
Paulo salio, del despacho esoterista,
camino rumbo a paseo de la reforma
y alli, se estaría,
el estuvo en esas montañas citadinas,
en esas colonias urbanas que son páginas distas,
que no escriben nada, ni lo dirían,
eso solo lo hacen las tarotistas,
y el alquimista......
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